Thursday, May 22, 2008

Carpe Diem

Carpe Diem! (cosecha el día)

Aprovecha el día,
no dejes que termine sin haber crecido un poco,
sin haber sido un poco más feliz,
sin haber alimentado tus sueños.

No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho de expresarte que es casi un deber.
No abandones tus ansias de hacer de tu vida algo extraordinario...
No dejes de creer que las palabras,
la risa y la poesía sí pueden cambiar el mundo...

Somos seres, humanos, llenos de pasión.
La vida es desierto y también es oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia...

Pero no dejes nunca de soñar,
porque sólo a través de sus sueños puede ser libre el hombre.
No caigas en el peor error,
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.

No te resignes...
No traiciones tus creencias.
Todos necesitamos aceptación,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.

Disfruta el pánico que provoca tener la vida por delante...
Vívela intensamente,
sin mediocridades.
Piensa que en tí está el futuro y en enfrentar tu tarea con orgullo,
impulso y sin miedo.
Aprende de quienes pueden enseñarte...
No permitas que la vida te pase por encima sin que la vivas...

Walt Whitman

Thursday, May 01, 2008

Lo nuevo de Gavin DeGraw

Thursday, April 24, 2008

"Papas en la mochila"

PAPAS EN LA MOCHILA


Un día, el maestro nos pidió de tarea que lleváramos papas crudas y una bolsa de plástico. Nos dijo que pusiéramos en la bolsa plástica una papa por cada persona a la que guardábamos resentimiento y escribiéramos su nombre en ella. Nos pidió que durante una semana lleváramos con nosotros a todos lados esa bolsa de papas en la mochila. ¡Algunas bolsas eran realmente pesadas!...
Naturalmente la condición de las papas se iba deteriorando con el tiempo. El fastidio de acarrear esa bolsa a todo momento me demostró claramente el peso que cargaba a diario en mi corazón y en mi vida debido al resentimiento. También aprendí como, mientras ponía mi atención en ella para no olvidarla, desatendía cosas que eran mas importantes para mi.
Este ejercicio me hizo pensar sobre el precio que pagaba por no perdonar algo que ya había pasado y no podía cambiarse...

Muchas veces pensamos que el perdón es un regalo para el otro, sin darnos cuenta que los primeros beneficiados somos nosotros mismos. Todos tenemos papas pudriéndose en nuestra "mochila" sentimental. La falta de perdón es como un veneno que tomamos diariamente a gotas pero que finalmente nos termina envenenando.
Muchas veces al primero que tienes que perdonar es a ti mismo por todas las cosas que no fueron como hubieras querido que fuesen. El perdón nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo. No significa que estés de acuerdo con lo que pasó, ni que lo apruebes. Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimó.
Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos que nos causaron dolor o enojo. El perdón se basa en la aceptación de lo que pasó.